Un proyecto de implementación es exitoso si se entrega a tiempo y dentro del presupuesto. En el ámbito del control de gestión, la estrategia de Odoo es clara: cuestionar para controlar. Aunque parezca inusual, esta práctica es fundamental para garantizar el éxito del proyecto a largo plazo.
El Riesgo de la Personalización y la Deuda Técnica
Desarrollar funciones personalizadas debe ser el último recurso. Un desarrollo personalizado siempre aumenta el costo y la duración del proyecto de implementación, e incluso lo puede poner en riesgo. Este tipo de desarrollo genera una deuda técnica porque el cliente deberá pagar servicios adicionales de mantenimiento y actualización durante los próximos años. Es un costo oculto que, aunque no se ve al inicio, puede comprometer la sostenibilidad de la solución a largo plazo.
La Filosofía de Odoo: Cuestionar para Aportar Valor
Para evitar estos riesgos, un líder de proyecto debe cuestionar las solicitudes de los clientes para garantizar que los beneficios de una solicitud sean equivalentes a su costo. Un líder de proyecto de Odoo comparte cómo un usuario clave le pedía replicar un reporte complejo que realizaban cada semana en Excel. Al cuestionar, descubrió que el director ejecutivo solo necesitaba revisar el saldo de unas cuentas analíticas. En lugar de realizar un desarrollo personalizado, el consultor le mostró al director cómo podía revisar estas cantidades directamente en Odoo, y el director ejecutivo se sintió satisfecho con la solución.
Cuestionar al cliente no solo reduce el desarrollo personalizado y el riesgo de retrasos, sino que también aporta un gran valor empresarial. La honestidad puede generar frustración al inicio. Un cliente relató que no le gustó trabajar con nuestro líder de proyecto porque cuestionaba todo lo que le pedía. Sin embargo, la estrategia garantiza que la solución sea más simple, económica y fácil de mantener a largo plazo. El proyecto pudo haber costado y tardado más si el líder de proyecto hubiera aceptado todos los desarrollos personalizados.