Los proveedores tradicionales de sistemas ERP definen varias funciones para analizar los flujos de trabajo: gerentes de proyecto, consultores junior y senior, y encargados de pruebas, entre otros. Sin embargo, "muchas manos en un plato hacen mucho garabato". Al dividir las funciones de un consultor y las de un experto en el producto, se puede generar una toma de decisiones ineficiente. Odoo, como producto, es mucho más fácil de usar que los ERP tradicionales, lo que permite que una sola persona conozca tanto la empresa como el producto, algo que la competencia no puede hacer.
El líder de proyecto de Odoo es responsable de tomar decisiones en el proyecto, y su función abarca la de un gerente de proyecto, un consultor y un asesor digital. Como gerente de proyecto, debe garantizar que la implementación se lleve a cabo a tiempo y capacitar al Punto Único de Contacto (SPoC). Como consultor y experto en el producto, debe simplificar el proceso al decidir cómo implementar las necesidades, cuestionar las solicitudes del cliente y configurar Odoo. Finalmente, como asesor digital, se concentra en el "por qué" al identificar los mayores desafíos del cliente y replantear el negocio en términos de lo que se puede lograr en el ámbito digital.
El líder de proyecto de Odoo tiene muchas responsabilidades, y el cliente lo debe ver como el punto de contacto clave durante la implementación. Su trabajo es solucionar problemas, ser experto en el producto y en la empresa, y actuar como un asesor confiable. Esto asegura que la comunicación sea directa y que las decisiones se tomen de forma eficiente, evitando retrasos innecesarios que podrían poner en riesgo el proyecto.